Mujer Mayor y Soledad en Cantabria
El estudio*, en base a 400 encuestas telefónicas en profundidad realizadas entre octubre y noviembre de 2020, demuestra que de las 74.262 mujeres mayores de 65 años que residen en Cantabria, el 32%, unas 23.800, sufre algún grado de soledad que va de la moderada a la extrema y un 6% (4.600) confiesa sentirse sola con frecuencia. La investigación devela que la calidad de las redes de apoyo de estas mujeres no es la deseada. Un 30% (22.400) de las encuestadas no cuenta con una red de amistades a la que acudir y un 11% (8.400) no dispone de una red familiar sólida. Además, 8 de cada 10 mujeres que sintieron soledad en otras etapas de su vida, sufren de soledad en la vejez. “Estos datos muestran el peso de la biografía en las situaciones de soledad en la vejez y muestran cómo no sabemos o podemos consolidar redes de apoyo suficientemente sólidas para cuando son necesarias”, explica Javier Vázquez, uno de los técnicos del equipo de Asonautas, el colectivo que ha realizado la encuesta para UNATE y la Fundación PEM. Los avances preliminares del estudio se presentaron en la tarde de ayer en las II Jornadas Mujer y Envejecimiento en Cantabria que organizan estas dos entidades especializadas en el trabajo con personas mayores y que se desarrolla hasta este 12 de diciembre de 2020.
“Una de las conclusiones más evidentes del estudio es que no hay un solo perfil de mujer mayor que vive en soledad y que la soledad es mucho más compleja que el hecho de no vivir acompañadas”, matiza Javier Vázquez. “Por eso, proponemos profundizar en estos estudios y fijarnos más en los diferentes tipos de soledad y de mujeres para que las políticas públicas sean efectivas y de largo recorrido”.
*El estudio se ha hecho con 400 mujeres mayores de 65 años que no viven en residencias, de las que 153 han sido elegidas de forma aleatoria entre la población de Cantabria y 247 se han seleccionado según el perfil sociodemográfico entre las mujeres que participan de las actividades de UNATE y de la Fundación PEM. De hecho la investigación muestra cómo entre las mujeres que participan de forma activa en entidades como estas hay un 50% menos de prevalencia de la soledad. El margen de error de la encuesta es del +/- 4,9%.
Escuchar el silencio, evitar el estruendo
Se trata del primer estudio cuantitativo y cualitativo sobre soledad percibida y detectada en mujeres mayores hecho en Cantabria y supone un aporte cargado de sentido y de información valiosa para todas aquellas instituciones o entidades que trabajan con y para las personas mayores. La publicación muestra una fotografía de instante que visibiliza algunas de las dimensiones subjetivas y objetivas que provocan la soledad no deseada. Aparecen los elementos biográficos y los de contexto, se escucha a las mujeres y se apuntan caminos para acompañar los procesos de envejecimiento desde el respeto a la diversidad y a la singularidad de cada persona.